La legislatura de Córdoba huele mal. No tan honorable.
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- 19 de Abril de 2024
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PRIMERA PARTE
“ALGO HUELE MAL EN RIVERA INDARTE Y DEAN FUNES”. ESCRIBE: MARCELO LUCERO
“La soberanía reside en el pueblo, quien la ejerce a través de sus representantes y demás autoridades legítimamente constituidas y, por sí, de acuerdo con las formas de participación que esta Constitución establece.”
Artículo Tercero; Constitución de la provincia de Córdoba.
Algo huele mal en Córdoba, además del Río Suquía.
Algo que está en la esquina de Rivera Indarte y Deán Funes se está pudriendo.
Antes, pretendía ser un órgano representativo de la democracia.
Ahora, se parece cada vez más a un retrete en donde giran y giran proyectos malolientes, hasta que salen despedidos a la cloaca.
Cada vez menos representativa, la legislatura de Córdoba parece más una reunión en Puerto Maderos que un grupo de servidores de la patria.
Hombres y mujeres con gordas billeteras hablan, a veces escuchan y hasta levantan las manos para decidir la suerte de todos los que están fuera del recinto.
Los ricos representan a los pobres.
Domingo Carbonetti, el más adinerado de nuestros legisladores, declaró en el año 2008 que poseía 110 inmuebles y 11 millones de pesos de patrimonio total.
¿Cómo alguien así puede entender lo que vive la mayoría de los cordobeses en el día a día y representarlos?
Pero no todo es culpa de quienes votan. Muchos de los candidatos electos se encargan de incumplir su palabra al poco tiempo de asumir sus funciones, respaldados por quienes fueron su antítesis durante la campaña electoral.
A eso le llaman “Consenso”.
SEGUNDA PARTE
Hay épocas en que la legislatura huele peor que de costumbre.
Desde El Avispero le dejamos una lista de cosas para que se dé cuenta de cuándo lo están por cagar:
Ojo cuando se debate sobre algún tema que toque intereses de empresas grandes.
Nada vale más para algunos dirigentes que la sonrisa de un gran empresario contento.
Ojo cuando se hace referencia a actualizar los salarios de los legisladores. Al contrario de lo que usted piensa, no se está pensando en bajar los sueldos de nuestros queridos representantes, sino todo lo contrario.
Ojo cuando se habla de crisis y de achicar gastos. No se está haciendo referencia a apoyar a los más afectados y reducir los subsidios a las empresas multinacionales, sino de desentenderse del tema.
Ojo cuando cercan la legislatura con vallas.
Este es un claro signo de que los legisladores saben que están haciendo las cosas mal y de que le tienen miedo a la gente que representan.
Ojo cuando hay torneos de fútbol en los que participa la selección. El mundo puede ser otro cuando la Argentina quede eliminada.
Y mucho ojo en épocas de elecciones. A los candidatos les gusta la cámara casi tanto como el poder. Ellos están dispuestos a todo para caerle bien a usted y a su familia.
Si usted no lo impide, la legislatura seguirá siendo lo que es hoy. No se fije tanto en la tele. Apague la caja boba un rato y póngase a pensar.
Piense qué hizo ese hombre o mujer al que usted le va a dar un voto de confianza por cuatro años.
En usted está hacer que la legislatura sea honorable.
“ALGO HUELE MAL EN RIVERA INDARTE Y DEAN FUNES”. ESCRIBE: MARCELO LUCERO
“La soberanía reside en el pueblo, quien la ejerce a través de sus representantes y demás autoridades legítimamente constituidas y, por sí, de acuerdo con las formas de participación que esta Constitución establece.”
Artículo Tercero; Constitución de la provincia de Córdoba.
Algo huele mal en Córdoba, además del Río Suquía.
Algo que está en la esquina de Rivera Indarte y Deán Funes se está pudriendo.
Antes, pretendía ser un órgano representativo de la democracia.
Ahora, se parece cada vez más a un retrete en donde giran y giran proyectos malolientes, hasta que salen despedidos a la cloaca.
Cada vez menos representativa, la legislatura de Córdoba parece más una reunión en Puerto Maderos que un grupo de servidores de la patria.
Hombres y mujeres con gordas billeteras hablan, a veces escuchan y hasta levantan las manos para decidir la suerte de todos los que están fuera del recinto.
Los ricos representan a los pobres.
Domingo Carbonetti, el más adinerado de nuestros legisladores, declaró en el año 2008 que poseía 110 inmuebles y 11 millones de pesos de patrimonio total.
¿Cómo alguien así puede entender lo que vive la mayoría de los cordobeses en el día a día y representarlos?
Pero no todo es culpa de quienes votan. Muchos de los candidatos electos se encargan de incumplir su palabra al poco tiempo de asumir sus funciones, respaldados por quienes fueron su antítesis durante la campaña electoral.
A eso le llaman “Consenso”.
SEGUNDA PARTE
Hay épocas en que la legislatura huele peor que de costumbre.
Desde El Avispero le dejamos una lista de cosas para que se dé cuenta de cuándo lo están por cagar:
Ojo cuando se debate sobre algún tema que toque intereses de empresas grandes.
Nada vale más para algunos dirigentes que la sonrisa de un gran empresario contento.
Ojo cuando se hace referencia a actualizar los salarios de los legisladores. Al contrario de lo que usted piensa, no se está pensando en bajar los sueldos de nuestros queridos representantes, sino todo lo contrario.
Ojo cuando se habla de crisis y de achicar gastos. No se está haciendo referencia a apoyar a los más afectados y reducir los subsidios a las empresas multinacionales, sino de desentenderse del tema.
Ojo cuando cercan la legislatura con vallas.
Este es un claro signo de que los legisladores saben que están haciendo las cosas mal y de que le tienen miedo a la gente que representan.
Ojo cuando hay torneos de fútbol en los que participa la selección. El mundo puede ser otro cuando la Argentina quede eliminada.
Y mucho ojo en épocas de elecciones. A los candidatos les gusta la cámara casi tanto como el poder. Ellos están dispuestos a todo para caerle bien a usted y a su familia.
Si usted no lo impide, la legislatura seguirá siendo lo que es hoy. No se fije tanto en la tele. Apague la caja boba un rato y póngase a pensar.
Piense qué hizo ese hombre o mujer al que usted le va a dar un voto de confianza por cuatro años.
En usted está hacer que la legislatura sea honorable.
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